África se encuentra en una encrucijada en su desarrollo. Hay dos futuros posibles para el continente y su gente. Uno en el que los gobiernos sigan el camino del desarrollo basado en combustibles fósiles que siguió el Norte Global. O un camino diferente en el que África supere los combustibles fósiles hacia una economía próspera construida en torno a la soberanía energética, la industrialización y la protección del medio ambiente natural.
Este segundo camino aún no está explorado.
Para lograr un futuro libre de combustibles fósiles, contaminación y dependencias neocoloniales, las instituciones africanas deben reformarse para lograr una transición energética rápida y justa en el continente.
Este informe explorará cómo se podría reformar el BAfD para ofrecer un futuro próspero a los africanos. También analiza cómo el banco podría desafiar los enfoques de desarrollo dominantes e intensivos en carbono.